Sueños espectaculares

Sin poder recordar las escenas previas, me encontré frente a un grupo de niños pequeños explicándoles lo que era Internet. Mi –en ese contexto- convincente y sintética explicación era que la Internet “es esa cosa con flechitas que va para arriba y para abajo” (¿?). Habiendo hecho comprender a aquellos niños el ciberespacio, salí de la poblada habitación. Para ese entonces ya tenía puesto una malla, un traje de baño amarillo. Con mi respectiva toalla en mano, me encontré con el resto de los espectaculares quienes se encontraban tomando sol en la playa. Si bien estábamos ensayando, nuestra actividad sólo consistía en asolearnos y ver las inmensas y azuladas olas. De repente aparece de la nada alguien de otro proyecto espectacular e inquisitivamente me pregunta sobre qué es lo que estábamos haciendo alli. Yo le digo que estábamos ensayando, y él interroga: ¿Pero por qué están en el Río de la plata?. Ni bien terminó de formular la pregunta, miro alrededor y me doy cuenta que la playa era parte de la costanera norte y que aquel -antes azulado- mar era más bien marronáceo y lleno de basura. De todas formas eso no impedía que Doris (con su traje de baño y gorra rosa) siguiese tomando sol sobre su toalla… Allí me desperté.

Daniel...